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Overlord vol. 14 novela ligera |
Traducción jpn-ing: HitoriTraducción ing-esp: RawiCorrección: Raruk Berg
Overlord Volumen 14: La Bruja del Reino Caído
Capítulo 3: El Último Rey
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Parte 1
Se había reunido una gran cantidad de documentos en esta oficina junto con varios funcionarios de asuntos internos. Sus expresiones eran difíciles de ver, ya que su mayor carga de trabajo había pasado factura. Otra razón para esto, sería el estrés que sentían por su conocimiento del peligroso estado del Reino.
Zanac sacudió su mano derecha que había estado firmando tantos documentos que empezó a dolerle y movió los hombros en círculos. Podía escuchar su cuerpo crujir mientras lo hacía.
Parecía que su cuerpo, al igual que los demás, anhelaba desesperadamente descansar.
Aunque quería tomarse un descanso en este momento, la cantidad de trabajo que se estaba transfiriendo a esta oficina, desafortunadamente, siempre aumentaba.
Dado que ese era el caso, debería buscar más manos para lidiar con esto o distribuir su trabajo a los demás. Desafortunadamente, no había nadie allí a quien Zanac pudiera delegar su trabajo. Si alguien se hiciera cargo de la carga de trabajo de Zanac, tendría que ser otro miembro de la Familia Real.
Zanac tenía sus propias razones para no solicitarle ayuda de su padre o Renner.
La verdad era que tenía acceso a la ayuda, pero no podía recurrir a ella.
Zanac volvió a levantar su bolígrafo, analizó el documento que estaba delante de él, lo firmó y lo selló.
Después de repetir la misma rutina por octava vez, se escuchó un golpe en la puerta
Se podían escuchar suspiros de varios funcionarios. Quizás esta era otra entrega de aún más documentos.
Uno de los funcionarios, cuya respiración agitada sonaba de manera poco natural como un chillido de cerdo, se levantó y caminó hacia la puerta a paso de tortuga. Sus movimientos eran tan lentos que era como si creyera que cuanto más lento se moviera, menos tendría que trabajar.
Un caballero estaba fuera de la puerta.
"Lamento muchísimo molestarlo en estos tiempos ocupados, pero Renner-sama desea hablar con Su Alteza."
No era lo que esperaba, pero seguía siendo un asunto igualmente problemático.
"Estoy ocupado, así que no. Dile que me hable durante la cena si tiene algo que decir."
Desde que desapareció su hermano, Zanac y su familia habían tratado de cenar juntos lo máximo posible. Estos últimos días eran la excepción, Renner probablemente había estado cenando sola por un tiempo.
Sin embargo, no podría sentirse sola. En estos tiempos cuando había escasez de doncellas, ella habría cenado con Climb y Brain en su lugar. Probablemente estaba más feliz ahora que nunca, tal vez más feliz que Zanac o su padre.
"Sí, Su Alteza."
El caballero cerró las puertas y se fue, pero Zanac sabía que Renner no aceptaría esa excusa en absoluto.
Zanac dejó de escribir y le ordenó al oficial que estaba a punto de regresar a su puesto que se quedara en su lugar.
Después de aproximadamente un minuto, volvieron a llamar a la puerta y el mismo caballero estaba detrás de ella con el mismo mensaje que antes.
"Lo siento mucho, Alteza. La princesa, dijo... Si no quieres que difunda algunos rumores que pueden ser ciertos o no, vaya a verla de inmediato."
¿Estaba recurriendo seriamente a la amenaza? Zanac esbozó una sonrisa irónica. Aunque no creía que su hermana realmente haría lo que decía, si estaba dispuesta a amenazarlo, probablemente debería escuchar lo que tenía que decir. Si los rumores se difundieran realmente, sin duda, su carga de trabajo aumentaría aún más.
Solo tenía que actuar como si lo obligaran contra su voluntad.
"Entendido, déjala entrar pero a nadie más que Renner. Y a esos dos, solo dejadlos esperando en la habitación contigua."
"Sí, Su Alteza."
Por la respuesta inmediata del caballero, Zanac pudo decir que sus predicciones eran correctas, esos dos la habían seguido.
Brain era el mejor guerrero del Reino, sin igual en su fuerza. Climb también era mucho más fuerte que un guerrero normal. Hacer que esos dos permanecieran en el palacio todo el día y ser los guardaespaldas de Renner, parecía una pérdida de talento.
Esos dos no estaban bajo el empleo directo del palacio, sino que se les pagaba a través del bolso privado de Renner y, por lo tanto, eran sus subordinados directos. Zanac no tenía nada que decir sobre su asignación.
Después de que el caballero cerrara las puertas, Zanac se volvió hacia los funcionarios que aún trabajaban en la habitación y dijo:
"Bien, mi hermana llegará pronto, ¿qué haré con ella? Alegraos, porque un descanso está sobre vosotros. Tres horas a partir de ahora. Descansad y regresad rejuvenecidos."
Los funcionarios dieron sus sonrisas cansadas y salieron con pasos pesados como si fueran zombis.
La Princesa Renner entró poco después. A diferencia de los funcionarios que acababan de irse, tenía una sonrisa radiante.
"Onii-sama, perdóname por hablar fuera de turno, pero esos funcionarios de asuntos internos podrían ser mucho más eficientes si los dejas descansar bien. Las personas tienden a cometer más errores cuando están cansadas. Hablando de eso, ¿estás bien Onii-sama?"
Zanac se frotó la barbilla cubierta de rastrojos. Había trabajado la misma cantidad de tiempo que esos funcionarios, por lo que, naturalmente, parecía tan cansado como ellos. Él quería tomarse un descanso, pero, como superior, demasiadas cosas dependían de él.
"Sinceramente, creo que deberíamos contratar a alguien que pueda falsificar mi firma."
"Había una persona que podía falsificar la firma de Padre, ¿debería ir a buscarlo?"
Renner miró en silencio a Zanac. Él sabía lo que significaba su pregunta, pero era mejor comprobarlo para estar seguro.
"—¿Qué quieres decir?"
"¿Nuestro padre todavía está bien?"
Zanac tenía una sonrisa irónica.
"Oye oye... ¿crees que planearía matar a nuestro padre? ¿En nuestra actual situación...? Padre no se sentía muy bien, está descansando en su habitación. Dudo que pueda descansar bien si le recuerdan sus deberes como rey. Es por eso que tú, como princesa, no deberías verle por ahora. Lo siento ~ "
La sonrisa de Renner coincidía con la suya. Al ver eso, supo que ella lo entendía todo.
"Onii-sama, entre nosotros, no hay necesidad de mentir. Onii-sama, sin los soldados del marqués Raeven, tienes suficiente mano de obra para poner a nuestro padre bajo vigilancia. Los Ministros de Asuntos Interiores y Militares ya deben haberse unido al lado de Onii-sama... ¿Qué planea hacer Padre?"
"Todavía quiere hablar con el Reino Hechicero."
Debido a eso, Zanac tuvo que intervenir como regente del Rey y ocuparse de todo lo demás lo mejor que pudo.
Como había encerrado a su padre, tenía que tomar todos estos asuntos en sus propias manos. Si todavía solicitara la ayuda de su padre dadas estas circunstancias, realmente sería el hombre más patético de la historia.
"Mmmm... Aun así, entiendo la línea de pensamiento de mi padre. Después de todo, había sido testigo de la destrucción instantánea de 200.000 hombres en el campo de batalla..."
Además, había perdido a Gazef Stronoff y a su propio hijo. Zanac no dio voz a esos pensamientos, sino que simplemente gruñó en su corazón.
"No es que no pueda relacionarme con su deseo de resolver esto a través de la diplomacia para reducir el número de víctimas al menor posible, pero las cosas ya han progresado a una etapa en la que una resolución a través de la diplomacia ya no es posible."
Zanac sacó una enorme hoja de papel y la extendió sobre la mesa.
No era un trozo de papel normal, sino un espléndido trozo de papel fino y blanco. En él estaba el mapa completo del Reino hecho a través de「Copia」.
"Mira. Estas son las ciudades del Reino que ya han caído en la conquista del Rey Hechicero."
Numerosas marcas 'X' salpicaban los lados norte y este del Reino, más de la mitad de las ciudades estaban marcadas. Alguien muy versado en cartografía sabría, solo por el tamaño de esas ciudades, que albergaban a un gran número de personas. Aquellos que eran lo suficientemente inteligentes, deberían haberse dado cuenta de que, si este mapa hubiera incluido aldeas, el número de 'X' sería muy mayor.
Zanac trazó un camino en el mapa con sus dedos.
"Aunque el Reino Hechicero parecía no haber estado haciendo ningún movimiento desde que comenzó la guerra, en realidad, habían estado invadiendo el norte."
Renner miró el país donde se detuvo el dedo de Zanac.
"Para presionar a nuestros vecinos como el Estado del Consejo, para evitar que se envíe ningún refuerzo aquí, ¿verdad?"
"Eso es correcto. Habíamos pensado que no se habían movido en absoluto y que la declaración de guerra era solo una amenaza vacía. Mientras nuestro ingenuo padre intentaba negociar con ellos, las cosas ya se han desarrollado hasta esta etapa. Las ciudades fueron destruidas y nuestra gente fue masacrada en masa."
Zanac rechinó los dientes e hizo un sonido audible.
"...Qué barbaridad. Absolutamente imperdonable.
Aquellos que podían tolerar este tipo de tratamiento, no eran aptos para ser llamados realeza.
"Así que, el Reino Hechicero no tiene intención de comunicarse con nosotros. ¿Seguramente están planeando algo sin precedentes? ¿Derecho?"
"Tienes razón, lo que sucederá después, quizás un acto de agresión más abierto."
Zanac asintió con la cabeza.
Por eso había estado ocupado formulando un llamado a las armas para enviar a todos los nobles del país.
"Dime, hermana mía, por favor, usa esa brillante mente tuya. ¿Por qué no notamos la invasión del Reino Hechicero? ¿Por qué no recibimos ninguna información de la invasión antes de que la ciudad norteña de E-Naüru hubiera repelido el ataque del enemigo?"
Cuando el Reino Hechicero asedió una ciudad, se dijo que ni una sola alma se libró de la masacre resultante. Sin embargo, asegurarse de que no se hubieran producido filtraciones, era una hazaña que era prácticamente imposible. Después de todo, los comerciantes y los viajeros todavía se pavoneaban incluso durante los tiempos de guerra.
¿Qué habían hecho para sellarles la boca a todos?
¿Era algún tipo de hechizo del Rey Hechicero?
"Onii-sama también podía olerlo, ¿verdad? El Reino Hechicero había puesto todas nuestras fuentes de información en estado de bloqueo."
"Ah... así que, tú también lo crees. Entonces, si ese fuera el caso, estas marcas "X" tampoco podrían ser ciertas."
"Si esto no fuera algo que el Reino Hechicero hubiera hecho, las cosas serían mucho más fáciles de explicar. Puede que tengamos un traidor entre nosotros.
La posibilidad principal, era que algún funcionario de asuntos internos los hubiera traicionado y reportaran información falsa. La otra posibilidad era que algunos de los nobles del Reino se habían puesto del lado del Reino Hechicero y estaban presentando informes falsos.
El dedo de Zanac continuó trazando líneas en el mapa. Reflexionó sobre qué noble podría corromperse para manipular una cantidad tan enorme de información.
El dedo de Zanac se detuvo en una ciudad y la apartó para no bloquearla.
"...Oh hermana mía, seguramente ya lo has descubierto, ¿qué noble nos ha traicionado?"
"¿No puede ser esa otra posibilidad?"
Ella podía ver a través de él por completo. Aunque en el pasado él había encontrado que la inteligencia de su hermana era molesta, ahora era más confiable que cualquier otra cosa.
"...Podría contar con una mano el número de personas que tendrían tanto control sobre la información que fluye hacia la Capital. El Ministro de Asuntos Militares, por ejemplo, pero ni siquiera él podría controlar el flujo de comerciantes y viajeros dentro y fuera de la Capital. Es imposible para cualquier persona dentro de la Capital tener la capacidad de bloquear nuestra inteligencia de esa manera."
"Si has entendido esto, seguramente Onii-sama ya tiene la respuesta en mente... Es el marqués Raeven."
"—¿Cómo? Imposible."
Zanac rechazó esa idea de inmediato, a pesar de que su dedo había estado descansando sobre E-Libera.
"¿Realmente crees que eso es imposible? El marqués Raeven es alguien que adora a su hijo. ¿Y si alguien secuestrara a su hijo y lo retuviera como rehén?"
"...¿Es así como coaccionaron al marqués Raeven? ¡Absolutamente despreciable!"
"Sin embargo, considero que puede habernos traicionado simplemente porque pensó que "la corona está condenada"."
Aunque no estaba dispuesto a creer en la traición del marqués Raeven, no había otro noble que fuera tan poderoso como él. Solo necesitaría pedir algunos favores con otros nobles cercanos a él antes de poder cortar por completo el flujo de información hacia y desde la ciudad de su elección. Los supervivientes también habrían optado por buscar refugio y protección de las ciudades más grandes, E-Libera habría sido una excelente opción en ese sentido.
¿Fue por esos factores que el Reino Hechicero le había puesto la mira?
"...¿Qué clase de persona crees que es el Rey Hechicero?"
"Anormalmente flexible en sus formas de pensamiento, alguien que posee el intelecto y la astucia de una nación entera. Lo más aterrador de él es el hecho de que no solo confía en su abrumador poder, sino que planea meticulosamente cada uno de sus movimientos. Se podría decir que es un monstruo para quien el concepto de arrogancia es completamente extraño."
¿Hoh? Zanac miró a Renner, algo parecía estar mal con ella. Su expresión era la misma de siempre, pero su voz tenía una emoción inusual, la de asombro y reverencia.
"La red de tramas que se desarrollaba frente a nuestros ojos quizás se tejió en el Reino hace muchos años. No somos más que polillas atrapadas."
"Preferiría decir mariposas."
"En cualquier caso, estamos a su merced, no importa si Onii-sama prefiere usar mariposas en esa metáfora o no. Incluso si nos deslizamos a través de estas redes ilesos, solo habría otra capa debajo... es francamente aterrador. No creía que alguien como él pudiera existir en este mundo. ¿Y si nuestras acciones estuvieran bien dentro de sus cálculos?"
"Entonces, ¿estás diciendo que él es mejor que tú?"
Renner se rio y no respondió.
"Volvamos a nuestro tema anterior, Onii-sama probablemente esté pensando en buscar pistas en la residencia del marqués Raeven, ¿verdad? No creo que puedas encontrar nada sustancial allí."
"Eso es cierto, pero seguramente no podemos permanecer inactivos, ¿verdad?"
Dada la probabilidad de que el marqués Raeven los hubiera traicionado, tenían que hacer algo al respecto. Todavía tenía la esperanza de que pudieran encontrar el más mínimo indicio de todo esto.
"Antes de hacer eso, tengo una pregunta para Onii-sama. Si la situación actual continúa, el Reino Hechicero seguramente iniciará la batalla final cerca de la Capital. ¿Ordenaría Onii-sama a los soldados defender la ciudad o enviarlos a recibir el ataque? ¿Cómo vamos a aumentar nuestras fuerzas?"
"Ya he recibido respuestas satisfactorias de nuestros nobles vecinos."
Los que estaban más distantes aún no habían respondido. No se debía a que aún no habían recibido su mensaje, sino porque deseaban mirar desde la barrera. Probablemente querían ver a la realeza eliminada para poder inclinarse ante el Rey Hechicero como sus nuevos súbditos. O, tal vez era porque no querían ponerse del lado malo del Reino Hechicero defendiendo el Reino.
Cualquiera de los dos pensamientos era ingenuo, por decir lo menos.
Su creencia de que podían distanciarse de esto era prueba suficiente de su total estupidez.
No, no debería burlarse de su idiotez. Si supieran lo despiadado que había sido el Reino Hechicero, no lo habrían hecho. Simplemente todos habían sido víctimas del bloqueo de información que se les había colocado.
Una vez que la Capital cayera, no había duda en su mente de que el Reino Hechicero extendería su brutalidad a las otras ciudades. De todos modos, los nobles que deseaban abstenerse de esta batalla, acabarían derrotados.
"¿Crees que... podríamos ganar?"
Zanac esbozó una sonrisa irónica y respondió con calma a esta complicada pregunta.
"No se trata de si ganamos o perdemos, simplemente no tenemos más opción que enfrentarlos en batalla. El Reino Hechicero quemará cada centímetro de este país y masacrará a todos nuestros ciudadanos. Esta es nuestra última apuesta en la supervivencia."
"...Onii-sama... ya es Rey, ¿eh?"
"¿Qué? ¿Qué quieres decir? ¿Estás diciendo que estoy siendo demasiado arrogante?"
"...Umm, si fuéramos derrotados en esta batalla, ¿no sería destruido el Reino? Si ese es el caso, entonces, los ciudadanos del Reino no estarían seguros sin importar a dónde escapasen. Si bien no creo que la elección de Onii-sama de apostar todo en esta batalla sea incorrecta, el marqués Raeven también puede habernos traicionado por esta razón, para salvar a los ciudadanos."
"Ya veo... para que su ciudad pueda convertirse en un santuario para los refugiados, hmmm."
"Pero, dudo que el Rey Hechicero permita que eso suceda. Quizás también le ordenó al marqués Raeven que matara a las personas que buscaban refugio en su ciudad para probar su lealtad."
¿Por qué los traicionaría el marqués Raeven? No, ¿los ha traicionado? Quizás esto también era otra estratagema del Rey Hechicero, sembrar las semillas de la duda entre ellos para atraerlo a él y a Renner.
Zanac recordó al marqués Raeven que solo quería un futuro mejor para el Reino.
Tal vez debía escribirle una carta y tener una conversación honesta con él, pero eso podría ser un movimiento peligroso.
Un traidor que continúa recibiendo sus cartas anteriores. Eso ciertamente causaría que el Rey Hechicero arrojara dudas sobre él.
Esa podría ser una estratagema que podría usar contra ellos, pero era mejor guardarla para una situación en la que el marqués Raeven marcharía junto con el ejército del Rey Hechicero. Este no era el mejor momento para hacer algo como eso. Si el marqués Raeven realmente estaba siendo coaccionado por amenazas contra el bienestar de su familia, no podía culparlo.
Zanac recordó al marqués Raeven que adoraba excesivamente a su hijo.
Recordó con tanta fuerza que sus ojos casi se entrecerraron en una línea hasta que su hermana lo trajo de nuevo a la realidad.
"¿Refugiados...? Hablando de eso, Padre quería que tú... bueno, él quería que buscáramos refugio en la Alianza Ciudades-Estado como representantes del Reino. Fue mucho antes de poner a mi padre bajo vigilancia. Si todavía quieres hacerlo, será mejor que te alejes de la Capital pronto."
Muy pronto tendía que reclutar a todos los que podía y enfrentar una batalla decisiva contra el Reino Hechicero. Siendo sincero, no tenían ninguna posibilidad. La derrota significaba que la Capital y las otras ciudades serían arrasadas.
Eso significaba que ningún lugar dentro del Reino estaba a salvo. Quizás deberían seguir la sugerencia de su padre y abandonar el país.
En circunstancias normales, había dos formas en que un vencedor habría tratado con la antigua realeza de un reino.
Uno era mezclar su linaje a través de matrimonios políticos, el otro era eliminar a todos con sangre real para no dejar cabos sueltos.
El Reino Hechicero, definitivamente elegiría el último.
"Esa es una excelente idea, ¿vendría Onii-sama también?"
"En este punto, ¿cómo podría...? Si nuestro hermano mayor todavía estuviera aquí, habría elegido correr también. No te preocupes por mí, ¿qué vas a hacer? El Rey Hechicero es un no muerto, por lo que probablemente no tomaría ese tipo de interés en las mujeres, por lo que sin duda también las matarían."
"Si el Reino Hechicero nos atacara, podría ser violada por uno de los nuestros que está lo suficientemente desesperado como para hacerlo."
Zanac mostró su disgusto en su rostro al escuchar cuán tranquilamente su hermana había dicho esas palabras. Pero, tenía que admitir que ella también estaba siendo realista.
La belleza de Renner era reconocida, no estaría fuera de discusión que existiera ese tipo de personas.
"Entonces, recuerda no alejarte de Climb y Unglaus por ahora."
"Mmm, está bien, no dejaré que Climb se vaya de mi lado."
"No hay nadie más que nosotros dos aquí y no voy a hablar de eso dada la situación actual, pero tienes que responderme con 'esos dos'."
¿Por qué Brain Unglaus elegiría servir a esta mujer?
Aunque había escuchado rumores de que Brain estaba interesado en Climb, no parecía ser gay en lo más mínimo. Sin embargo, después de algunas investigaciones, parecía que no había tenido una mujer en absoluto; no podría ser porque solo le interesaran los niños, ¿verdad?
No dio voz a esos pensamientos dado lo aterrador que era su hermana. Si esos dos lo descubrieran, sería problemático.
"De todos modos, no tengo la intención de huir. Como princesa, enfrentaré la muerte con gracia y dignidad."
Eso fue inesperado.
Había pensado en esto en el pasado, en cómo ella estaría bien con cualquier tipo de vida mientras estuviera con Climb. Tal vez solo estaba poniendo un frente y ya se había preparado para escapar.
Ella sería del tipo que haría eso...
"Pero, incluso un cadáver podría ser explotado por el Rey Hechicero."
"Quizás, ¿Onii-sama liderará el ejército contra el Rey Hechicero?"
"Ah, sí. Aunque mi presencia no marcaría ninguna diferencia, el ejército necesita un miembro de la realeza para liderarlos, tengo que tomar una posición."
Zanac miró hacia el techo.
"Has dicho algo en el sentido de que yo soy el futuro rey en el pasado, es por eso que esta responsabilidad recae sobre mí... mi padre, con suerte, se encargará de mis arreglos funerarios... puedes elegir huir en cualquier momento."
Aunque descubrió que su hermana era molesta la mayor parte del tiempo, seguían compartiendo la misma sangre. Hacer lo que un hermano debería hacer era lo menos que podía hacer. Quizás podría recibir la piedad de Dios después de su muerte.
"Entiendo. Lo haré cuando llegue el momento."
Cuando Zanac retiró su mirada hacia ella, vio que Renner había respondido con su sonrisa habitual.